"Las ovejas no pierden el tres" 2015 - Alvaro Fernandez Armero


NI FU NI FA...PASTORIL.

 

Qué quieren que les diga....Pues eso, ni fu ni fa...al menos es lo que pensé al terminar de ver esta especie de comedia (que no lo es, puesto que no me hizo reir) y melodrama (que tampoco, ya que por mucha realidad que cuente no me sentí conmovido en ningún momento). La historia de un matrimonio que se marcha a vivir a un ambiente rural mientras el marido 'Raúl Arévalo' busca inspiración como escritor frustrado y la mujer 'Inma Cuesta' anhela ser de nuevo mamá compatibilizándolo con su trabajo, no me satisface en absoluto. La apatía de los cónyuges lastra mi aburrimiento a lo largo de todo el film de Álvaro Fernández Armero, que no logran ni salvar los esfuerzos interpretativos de Alberto San Juan (hermano de Arévalo en la ficción) que busca conciliar su divorcio y sus hijas con un amorío de una chica 20 años menor que él, ni la actuación de una competente Candela Peña (hermana de Cuesta) que suspira por una relación de compromiso obsesionándose en las redes sociales y fracasando estrepitosamente en encontrar el hombre ideal. Durante el film me sentí como una de las ovejas a las que alude el título, entre bostezos e indiferencia. Supongo que el mensaje que manda la película es que no hay que dejarse llevar cual ovino guiado por una sociedad que nos marque unos objetivos concretos, tales como encontrar pareja, casarse, la maternidad, un buen trabajo, la afrenta de la soltería, etc...y que en este film torpemente nos muestra como solución (y esto es lo único que merece la pena en la película) el encauzamiento de la vida a través de la reflexión, las decisiones personales, la comunicación familiar, el deseo de autoreafirmación y la detereminación para encontra la felicidad, aunque haya que pastorear ovejas y cultivar hortalizas (en el caso del personaje de Raúl Arévalo), apartar los deseos sexuales de juventud y centrarse en sus hijas (en el de Alberto San Juan), abandonar móviles y ordenadores para encontrar pareja (Candela Peña) y emprender tu propio negocio aún pasando apuros sin perder el deseo de tener más hijos en el caso de 'Inma Cuesta'. Una película que tiene mensaje pero que como ya he comentado..Ni fu ni fa, debido a su falta de gracia, poco entusiasmo en el guión y actuaciones correctas pero poco agraciadas dada la desanimada linealidad del planteamiento. Vamos, como una oveja mirando a un tren, que lo deja pasar sin prestarle mucha atención.

Escribir comentario

Comentarios: 0